martes, 29 de diciembre de 2009

Retro-Análisis: E-Swat (Master System)



Eswat tuvo el privilegio de ser el juego que compré por primera vez para mi Master System después de que me hubiesen regalado la máquina semanas antes -siendo más preciso, este juego fue un regalo por mi santo- y de entre todos los títulos que había en la tienda recuerdo haberlo escogido usando el método más común por aquel entonces: seleccionar el juego con la carátula más chula y con las dos o tres fotos en contraportada que más llamasen la atención (entre todos los disponibles recuerdo con claridad que estaba dudoso también entre Ghostbusters -que menudo tordo de juego era- y Secret Command -que mi hermano compró al día siguiente).

Ni mucho menos sabía que aquel juego era un port de una recreativa del mismo nombre, cosa que de haber conocido seguramente me hubiese reafirmado más aún la compra con la esperanza de encontrar en aquel cartucho de Master que debía rondar los dos megas de memoria lo mismo que en su homónimo arcade. En caso de haber sido así lo más probable es que la desilusión hubiese sido mayúscula al llegar a casa y probarlo dado que aunque en algunas fases sí respetaba el desarrollo original, otras eran totalmente nuevas con bosses diferentes, se habían eliminado otras tantas fases, cambiado enemigos por otros, etc. (No hay que confundir con la versión de Mega Drive que es un juego completamente diferente y en mi opinión el mejor de los tres en cuanto a gráficos y jugabilidad). Vamos, que se trataba de una versión capada y modificada del original. Pero como no fue así y para mi aquel Eswat era un título nuevo me quedé satisfecho con la elección, porque a decir verdad, el juego me gustó mucho.



Lo cierto es que echando la vista atrás y valorando los gráficos del título nos encontramos con un juego a todas luces muy simple, más aún conociendo hasta donde llegó Master System años después. Los personajes eran muy pequeños, con pocos detalles y una animación bastante simple y escueta. Los escenarios por su lado también eran en extremo simplones y de una extensión demasiado limitada y encima repitiendo estructuras, además el uso de la paleta de colores era muy vago y poco trabajado y no se usaban tramas para enriquecerlos en ningún lugar y todas las superficies contaban con colores planos. No es que el título fuese una versión rebajada del arcade, si no que parecía un trabajo hecho a toda prisa y con un presupuesto ínfimo.



Las melodías, en cambio, si lograban representar mejor los temas del juego original, presentando el cartucho de la 8 bits, no una gran variedad de temas, pero sí muy pegadizos todos, desde la música de ascensor de la primera pantalla hasta la música de los créditos finales. En cuanto a efectos de sonido, éstos pecan de no existir prácticamente durante el transcurso del juego más que alguna explosión al acabar con un boss, el sonido de los impactos cuando nos golpean o nosotros golpeamos a un jefe...Y encima de una calidad no muy alta.



En cuanto al desarrollo, E-swat presenta la tradicional formula de protagonista con pistola que avanza por el juego matando a todo quis qui que aparece contando con un botón para disparo -también en diagonal y hacia arriba-, uno de salto y la unión de estos dos botones que combinados dan lugar a un ataque especial, los cuales vamos recogiendo durante el nivel. El juego contaba con 5 fases, cada una dividida en dos niveles al final del cual nos espera un boss no muy complicado. Algunas de estas fases y bosses, como hemos comentado antes, respetaban el juego original, como las dos primeras, en cambio otras eran totalmente nuevas y convertían enemigos normales del arcade en jefes -como las calaveras voladoras- e introducían enemigos nuevos como las motos voladoras o los tíos con palos. En cuanto a enemigos el juego es fiel a la mitología de los juegos de disparos de la época y nos presenta a todos los estereotipos del mundo del videojuego: los tíos tristes con cuchillos, los tíos con pistolas, las guarrillas que dan volteretas, los jorobados gafudos que lanzan granadas, etc. Aunque por desgracia, la variedad de estos no es muy alta.



Uno de los problemas del juego viene dado por el hecho que aunque tenemos 10 niveles que recorrer, estos son sorprendentemente cortos y no tardamos más de dos o tres minutos en recorrerlos, así como unos bosses muy fáciles de vences gracias a los ataques especiales que recogemos durante la fase, por lo que podemos completar el título en quince o veinte minutillos que le dediquemos sin tener que morir ni una sola vez (además contamos con una vida y tres continuaciones). Como nota curiosa comentar que las dos primeras fases del juego son las más difíciles del cartucho, debido a la poca vida que tenemos al no tener a nuestra disposición la armadura especial y a la gran cantidad de hordas enemigas que tenemos que abatir y que impiden avanzar -para las que hemos de tener cuidado de no perder toda la munición ya que si nos quedamos a cero no podremos defendernos y nos veremos obligados a morir-. Una vez superadas estos dos niveles y con la armadura en nuestro poder que nos otorga más vida seremos capaces de recorrer los niveles tirando hacia adelante como un loco y sin preocuparnos mucho porque nos disparen.



Es curioso como en la memoria las cosas se van deformando y más que el recuerdo en si nos queda la impresión que de de éstas tuvimos en su momento. Yo recordaba este título como gráficamente bastante bueno y bastante complicado, donde había que saberse de memoria patrones enemigos al dedillo y avanzar con cautela y del cual me costó bastante llegar hasta el final con fases más largas y complejas. En cambio, al jugar hoy en día veo que realmente el trabajo gráfico fue bastante pobre y hecho a desgana (dos años antes MS ya había tenido cosas mucho más trabajadas como Kenseiden) y sobretodo muy corto y sencillo.



LO MEJOR:
-Las melodías son pegadizas y respetan la versión original.
-Es muy sencillo y divertido de jugar
-Variedad en los bosses.
-Algún scroll suelto que tiene por ahí en las nubes, el agua...que queda resultón.

LO PEOR:
-Graficamente es un poco simple, se podría haber utilizado alguna trama o haber dado mejor uso a la paleta de colores disponible.
-Personajes pequeños y animados con pocos frames.
-Es exageradamente corto.
-Los bosses duran un suspiro con las magias y los más resistentes no requieren mucho esfuerzo ni habilidad para acabar con ellos.
-Las dos primeras fases son las más difíciles del juego.
-Para su época era demasiado caro para lo poco que duraba (6000 ptas/36 euros)

NOTA: 5.5

No hay comentarios:

Publicar un comentario